Sin duda alguna, el de ayer no fue el mejor partido de la Selección Española. Croacia se encerró en su área desde el primer momento y los hombres de Del Bosque no fueron capaces de romper líneas y desbordar. Sólo lo hicieron durante los últimos diez minutos de un encuentro que resultó aburrido y en el que Casillas volvió de nuevo a brillar con luz propia al detener uno de los pocos tiros que los croatas lanzaron entre los palos de la portería española. ¡Pero qué tiro! Estaba claro que ellos jugaron a la contra y que España estaba... cómo decirlo... ¿lenta? ¿sin reflejos? ¿cansada? Y eso que la alineación titular fue la misma que contra Irlanda.
El míster sacó de inicio al 'ansiado' nueve que todos pedían en el partido contra Italia. Sí, repitió Torres. El mismo que marcó dos tantos frente a los irlandeses. Pero los chicos de la Selección Española no estuvieron ayer muy finos que digamos. Y, claro, Croacia tampoco era Irlanda. El primer tiempo fue aburridísimo. España tuvo el balón, lo movió (lentamente, eso sí), tocó... pero pocos remates a puerta. Y Croacia, atrás. Imposible franquear la férrea defensa croata hasta que entró Navas en la segunda parte y le dio un poquito más de velocidad al juego.
La decisión de Del Bosque de cambiar a Torres por Navas fue, cómo no, criticada. ¡¡Estamos en España y la crítica es el deporte oficial!! "¿Y a quién va a pasar Navas si no tenemos delanteros?", decían en Telecinco (cuyos comentarios, lo reconozco, hay veces que me sacan de quicio). Luego salió Fábregas por Silva... y también hubo críticas. Había algunos, incluso, que pedían que volviera Luis Aragonés. Y yo, 'delbosquesiana' convencida, seguía confiando en el míster, que para eso es él quien sabe de esto.
Y al final, Del Bosque acertó con el planteamiento del partido y ganamos. Sufriendo, eso sí, pero el fallo no fue del técnico de la Selección. Eran los chicos (y lo digo con todo el cariño del mundo) los que estaban ligeramente "empanados". Los últimos diez minutos del encuentro fueron los únicos que merecieron la pena. España, ya sí, consiguió profundizar en el área croata y nos quedamos ahí hasta que conseguimos el ansiado gol que nos dio el pase a cuartos de final. Un gol de Navas que nos supo a gloria y que, en mi caso, disipó cualquier atisbo de duda sobre nuestro combinado nacional. Aunque también es cierto que en ningún momento del partido perdí la esperanza.
Somos los vigentes campeones de Europa, los campeones del mundo... y aunque seamos grandes, que lo somos, podemos tener una 'pájara'. Lo que pasa es que precisamente por esos títulos que tenemos le exigimos más a los nuestros. Pero confiemos en ellos y no seamos catastrofistas, por favor. Vamos a dejar que Del Bosque haga su trabajo y no metamos presión a los jugadores. Vamos a relajarnos y a disfrutar, que la Eurocopa es una vez cada cuatro años. Yo, sinceramente, creo que podemos ganarla. ¿Vosotros no?
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Del Bosque volvió a repetir el 11 inicial que jugó contra Irlanda |