El secretario de Defensa estadounidense, Robert Gates, ha acusado a Irán y a Siria de suministrar cohetes y misiles al grupo terrorista Hezbollah. Según Gates, “Hezbollah tiene más cohetes y misiles que la mayoría de los gobiernos del mundo”, lo que contribuye, a su juicio, “a desestabilizar toda la región”.
Es por ello que Estados Unidos “vigila atentamente” la situación, ya que, según ha explicado Robert Gates, Irán y Siria están proporcionando armas “cada vez más sofisticadas” a este movimiento chiíta libanés, considerado por Whasington como un movimiento terrorista financiado por ambos países.
Estas declaraciones se produjeron el pasado martes, durante la rueda de prensa conjunta del secretario de Defensa estadounidense y su homólogo israelí, Ehud Barak, quien se encuentra de viaje oficial en Estados Unidos desde el pasado domingo para abordar diferentes asuntos de seguridad y contemplar la reanudación de las negociaciones entre israelíes y palestinos.
Durante su intervención en la rueda de prensa, Barak señaló que “estos sistemas armamentísticos son considerados una amenaza para la estabilidad de la región” e insistió en apuntar hacia Siria, país que “respalda a Hezbollah de una manera dañina”, dijo.
Precisamente el presidente israelí, Simon Peres, ya había acusado recientemente a Siria de proporcionar a Hezbollah los misiles Scud que se lanzan contra Israel, hecho que el régimen de Bashar al Assad desmintió rotundamente.