Tras jactarse, hace unos días, de haber conseguido boicotear las elecciones legislativas, en las que tan sólo un 40% de la población acudió a votar, los talibanes reivindican ahora la autoría de la muerte de nueve soldados de la ISAF (Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán) al sur del país.
Blog de la agencia Kali Yuga |
Según el comunicado emitido por la ISAF tras producirse el suceso, la muerte de los soldados se produjo el pasado martes como consecuencia de la colisión del helicóptero en el que viajaban. No determinaba este organismo la nacionalidad de los fallecidos -como suele ser habitual en su política informativa-, aunque la cadena estadounidense CNN apuntaba la posibilidad de que fueran norteamericanos, aspecto éste que posteriormente fue confirmado.
Pero al margen de que se informe o no acerca de las nacionalidades de los fallecidos, lo que resulta indignante es que los talibanes no desaprovechen oportunidad alguna para atribuirse 'éxitos' en su yihad (guerra santa) contra los militares “yanquis”, como así los denominan en los 'partes de guerra' que se difunden, casi a diario, a través de la agencia informativa Kali Yuga, un blog de marcado carácter pro-taliban y escrito en un español que deja mucho que desear.
Con respecto al supuesto accidente del pasado martes, el 'parte de guerra' emitido por Kali Yuga sitúa el lugar en el que se produjo el incidente (al noroeste de la provincia de Zabul, en el distrito de Daychopan) y afirma que, a pesar de lo difundido por ISAF, éste fue obra de los talibanes. “De este modo -se puede leer en el blog de la agencia de noticias- este año se ha convertido ya en el más letal, con 529 muertos declarados, faltando aún más de tres meses para su terminación”.
Según la agencia Kali Yuga, el Emirato Islámico de Afganistán (nombre con el que se conocía al antiguo régimen talibán) asegura que los muyahidines (aquellos que hacen el yihad o guerra santa) abatieron el helicóptero con un misil de largo alcance, a pesar de que la Oficina de Prensa de la ISAF afirmó en su comunicado que no había “informes de fuego enemigo en la zona”.