El Tribunal Supremo ha ratificado que los cadáveres de 30 de los 62 militares españoles que fallecieron en el accidente aéreo del Yakovlev 42 en Turquía fueron identificados de forma errónea. Así lo recoge hoy el diario Público, basándose en la sentencia que fue adelantada el pasado 17 de marzo y que finalmente fue dictada el pasado día 22, en la que se confirman las condenas impuestas por la Audiencia Nacional a los tres responsables penales de las identificaciones falsas: el general médico Vicente Carlos Navarro (tres años de cárcel), y el comandante José Ramírez y el capitán Miguel Sáez (18 meses de prisión cada uno).
"Los 30 documentos -consta en la sentencia, en alusión a los certificados de defunción de los 30 cadáveres que fueron erróneamente identificados- obedecen a un mismo concepto, la documentación de una previa mendacidad de la necesidad de repatriar, con rapidez, los cadáveres de los militares españoles en un accidente aéreo cuando regresaban de una misión internacional respecto a la que la opinión pública se encontraba profundamente dividida".
El Supremo también confirma que el principal condenado, el general Navarro, "no realiza la identificación de 30 de los cadáveres, sino que se asigna un nombre a una bolsa, haciendo parecer que los había identificado, incluso lo manifiesta a sus superiores y subordinados". "De esta mendicidad -añade la sentencia- redacta los certificados de defunción de personas que, efectivamente, habían fallecido, pero sin identificar el cadáver". Sin embargo, el general Navarro "afirmó que los había identificado".